domingo, 5 de junio de 2011

ÓPERA CARMEN. TEATRO VILLAMARTA DE JEREZ. SÁBADO 4 DE JUNIO DE 2011













CARMEN, CARMEN, CARMEN





Ópera CARMEN de Georges Bizet.
Libreto de Henri Meilhac y Ludovic Halevy, basado en la obra homónima de Prosper de Mérimée.
Sala: Teatro Villamarta de Jerez
Aforo: Completo.

Reparto:
Carmen, María José Montiel; Don José, Marcelo Puente; Ecamillo, José antonio López; Micaela, Ainhoa Garmendia; Frasquita,Cecilia Lavilla Berganza; Mercedes, Marina Pardo; Remendado, José Canales; Dancairo, David Rubiera; Zúñiga, Francisco Santiago; Morales, Angel Tomás Pérez; El destino, Leonor Leal
Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia. Director: Elena Herrera.
Coro del Teatro Villamarta. Director: Juan Manuel Pérez Madueño. Escolanía de la Escuela Municipal de Música.
Escena: Paco López.




Jesús Sánchez-Ferragut
El amor es hijo de gitana, / jamás conoció ley alguna: / si no me quieres, yo te quiero, / pero si te quiero, ¡Ten cuidado!

Así reza la traducción de la famosísima Habanera del primer acto de la ópera Carmen, una de las óperas más representadas y afamadas de todos los tiempos…Bueno de casi todos los tiempos, porque mientras su creador, Geoorges Bizet vivió, la ópera solo obtuvo un discreto puesto entre sus producciones musicales. Tan solo a la muerte del compositor francés, Carmen alcanzó la plena y máxima popularidad que hoy sigue manteniendo, y disputando a obras como La Traviata o El Barbero de Sevilla.

No se trata, sin embargo de una de las óperas de mayor complejidad técnica, ni de mayor belleza musical, ni siquiera se lleva la palma en la complejidad escénica, pese a que la tiene, y grande. Entonces ¿A qué se debe la popularidad de esta obra de un francés del S XIX sobre las historias de amor de una cigarrera de Sevilla? El problema no está resuelto, y precisamente por eso, la ópera Carmen sigue estando de actualidad, y sus diferentes puestas en escena siguen estando en pleno vigor.

El personaje central de la obra, es decir, la Carmencita gitana, trabajadora de una fábrica de tabacos en Sevilla, admite mil actualizaciones y énfasis, pues las relaciones de pareja, en cuanto son en gran parte lucha por el poder, reflejan la pugna por la dominación en la misma. Y eso es un asunto actual, que sin duda, va más allá de la piel del personaje.

El personaje de Bizet está por encima del amor, al que utiliza a su conveniencia, sin mirar al pasado ni al futuro, porque a Carmen lo que le importa es su libertad, su soberana voluntad, lo que hoy podríamos denominar la “república independiente de su autonomía personal”. Sabedora de sus encantos, los utiliza siempre con decisión, determinación y “pasión española”, en pro de su causa. Carmen paga con su vida el alto precio que la vida impone a hombres y mujeres (hoy desgraciadamente las mujeres siguen padeciendo violencia machista) por el mero hecho de rebelarse contra la dominación de la pareja.

Entrando en la representación de la Carmen producción del Teatro Villamarta que tuve la ocasión de ver el pasado sábado 4, tengo que concluir que con respecto a la primera producción de hace cinco años, ha ganado enteros. Para empezar, la Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia, lo hizo fenomenal, adecuándose perfectamente al foso villamartino y sonando muy compacta y empastada.

Para continuar, la actuación de la mezzosoprano madrileña María José Montiel que cubrió las expectativas del más exigente de los espectadores. Su voz de mezzo con tintes oscuros y amplio registro, con estupenda entonación, y cantando de manera natural haciendo fluir las notas sobre el aire desde dentro, hicieron totalmente creíble su personaje. Y sobre todo una importantísima cualidad: La de mantener constantemente la fuerza, intensidad y el nivel durante toda la representación, de un personaje sobre el que gira toda la obra. Brava.

En cuanto al resto de los cantantes, antes que nada, decir el buen trabajo que ha supuesto el conseguir, en líneas generales, un elenco muy bien equilibrado, sin grandes diferencias entre unos y otros, cada uno en su papel, evidentemente. Así, fue notable la intervención del tenor argentino Marcelo Puente, poseedor de una peculiar voz, y que mantuvo el nivel de principio a fin de la obra.

José Antonio López no solo fue un “Escamillo” de altura, sino que su calidad como barítono también convenció al respetable jerezano. Ainhoa Garmendia, la dulce y sencilla Micaela en la obra, tuvo una correcta actuación, y su momento de gloria con el aria del tercer acto.

La única repetidora de la puesta en escena del año 2006 fue la soprano Cecilia Lavilla Berganza, que junto con la mezzo Marina Pardo, dieron vida a los papeles de Frasquita y Mercedes respectivamente, con notable alto. Y no quiero dejar pasar sin comentar la actuación de mi paisano cañaílla, el barítono Ángel Tomás Pérez, que lo hizo francamente bien en el papel de Morales.

La ópera Carmen ha cerrado la temporada del 2011 en el Villamarta. Una obra consolidada del coliseo jerezano, y que le ha reportado no pocas alegrías y recompensas de muchos públicos de España.


PUBLICADO EN DIARIO BAHÍA DE CÁDIZ:
http://www.diariobahiadecadiz.com/detalle-noticia-12356