lunes, 29 de julio de 2013

OPERA IL TROVATORE EN CHICLANA



Fotos: JSF
MUCHAS GANAS Y UN EXCELENTE MARCO PARA “IL TROVATORE” EN EL BICENTENARIO DE GARCÍA GUTIÉRREZ


IL TROVATORE

ÓPERA EN CUATRO ACTOS DE GIUSEPPE VERDI
Libreto de Salvatore Camarano, basado en la obra de teatro “El Trovador”, original de Antonio García Gutiérrez.
Reparto:
Manrico: Andrés Veramendi; Leonora: Lola Casariego; Azucena: Inés Olabarría; Conde de Luna: Arturo Pastor; Ferrando: Ángel Jiménez; Inés: Lucía Escribano; Ruiz: Daniel Báñez.
Orquesta Sinfónica del Aljarafe. Dirección musical: Pedro Vázquez.
 Dirección de escena: Ignacio García.
Coro Nova Nerta. Director del coro: Juan Luis Lorenzo
Producciones Telón. Ayuntamiento de Chiclana y Fundación Cruzcampo


 Jesús Sánchez-Ferragut

Chiclana se dio cita en su Plaza Mayor para conmemorar el bicentenario del nacimiento del escritor Antonio García Gutiérrez. Un lleno absoluto, fue la respuesta del pueblo chiclanero a la cita organizada por el Excmo. Ayuntamiento de Chiclana, con el patrocinio de la Fundación Cruzcampo, para poner en escena Il Trovatore de Verdi, en versión de Producciones Telón.
La ocasión no era para menos, pues además de estar en el año de Verdi, ha coincidido este 2013 con el bicentenario del escritor chiclanero, autor de la obra teatral El Trovador, inspiradora del libreto de Il Trovatore, una de las grandes óperas del genial italiano. Las casi mil trescientas localidades ocupadas son la muestra de las ganas, que tanto el pueblo de Chiclana, como su Ayuntamiento, han puesto para celebrar la efemérides.

El marco de la representación, la renovada Plaza Mayor de Chiclana, posee unas características excelentes para eventos culturales. Con unas dimensiones estupendas, arropada por los nuevos y modernos edificios que le dan la configuración actual, y sobre todo con un escenario espléndido, como lo son el atrio y la fachada neoclásica de la Iglesia Mayor de San Juan Bautista, promete ser lugar común de acontecimientos importantes de la vida chiclanera.

Y hasta aquí las bondades de la representación de Il Trovatore de Verdi, en este Bicentenario de García Gutiérrez. Lo que podría haber sido una excelente representación operística de una de las grandes obras verdianas, se desinfló casi desde el comienzo de la representación, que arrancó con media hora de retraso sobre el horario de comienzo.

La escenografía estuvo bien planteada, ya que partió de una buena idea de concepto del decorado de la obra, al basar la escena sobre diversas plataformas que se van transformando de un acto a otro, con agilidad. También contó con una más que aceptable iluminación, si se tiene en cuenta que se trataba de una ópera al aire libre.
Sin embargo, lo principal falló estrepitosamente: El sonido. Los micrófonos que portaban los cantantes incomprensiblemente fallaban, una y otra vez, ora no funcionando, ora haciendo ruido de conexiones. A ello se unió una deficiente cantidad-calidad de altavoces, que no pudieron dar el soporte adecuado a los 1.300 espectadores acomodados en la estupenda plaza chiclanera. Todo ello fue en detrimento del elenco de cantantes, que vieron sus voces mal amplificadas e incluso interferidas por culpa de micrófonos, altavoces y mesas de mezclas que se mostraron ineficientes.
Cosa diferente es la Orquesta del Aljarafe, a la que no se le puede pedir más, ya que los apenas 30 músicos que la integran, no pueden suplir a los noventa o cien que una buena representación verdiana requiere, por más que se pongan micros a todos los instrumentos. Y es que no es lo mismo, en absoluto, recoger con micrófonos el sonido de una orquesta al completo y transmitirlo al público, que suplir con micrófonos y a golpe de mesa de sonidos la falta de músicos. Nada que ver.

De los cantantes, en mi opinión quien tuvo una mejor noche fue Inés Olabarría, en el papel de Azucena, exhibiendo una bonita voz, una notable dicción y una importante faceta dramática. El público lo agradeció.
Del resto del elenco destacar el aria “D'amor sull'ali rosee", pieza obligada del repertorio de toda soprano dramática, interpretada correctamente por Lola Casariego en el papel de Leonora.
El tenor peruano Andrés Veramendi, tuvo una noche con altibajos, con momentos donde alardeó de potencia vocal pero con otros donde la sobreactuación le jugó alguna mala pasada.
El barítono alicantino Arturo Pastor tuvo una aceptable intervención como Conde de Luna. Muy bien en el dúo con Leonora.
El coro, la verdad no estuvo muy acertado, pasando con más pena que gloria, salvo la escena primera del acto II donde consiguieron  aunar  voces en la conocidísima “zingarella”.

Enfin, una representación donde Chiclana y su Ayuntamiento le pusieron muchas ganas, ilusión y un espléndido marco, pero donde la producción no estuvo a la altura.


Publicado en Diario Bahía de Cádiz: 
http://www.diariobahiadecadiz.com/detalle-noticia-24403